Lo primero que hicimos fue coger una avioneta. A todos nos hace mucha ilusión. Conseguimos que todos tengamos ventana.
Una de las peticiones especiales de uno de los viajeros era sobrevolar el Grand Canyon. Nadie puso pegas y nadie se arrepintió por ello... Bueno, puede que alguno lo pensara durante los periodos de mareo que aquello representó.
El despegue va bein, primero un gran bosque y luego, luego….un laberinto de rios y caminos. Se abre EL GRAN CAÑON. A lo lejos se ve el Rio Colorado, que va cambiando de color a medida que avanzamos.
A medida, que vamos más al norte, la avioneta sube más y se va moviendo más (esta es la parte nada romántica del relato… jesús que mareo). Lo que hasta medio trayecto era una maravilla, se estaba convirtiendo en una pesadilla. Miro el paisaje con recelo y pienso: Bueno ya lo he visto, porque no nos bajamos ya que llevo un mareo….
Veo a Joan grabando, Gemma sonriendo, Dani traniquilo.
Uno que era el cámara oficial del CTC 2000 no le tocó otra cosa que inmortalizar esos momentos, como tantos otros, en el vídeo. Y la misión se cumplió aunque os recomiendo que disfruteis de esa experiencia, la de grabar en video el paisaje durante un paseo en avioneta... Resistí al vómito, pero nadie me quitó un buen mareo de encima. Singularidades aparte, no hay menos que agradecer a Pilar su gran idea, que nos permitió ver por encima aquello que despues fuimos a pisar.
Termina el vuelo. Aterrizamos. Me giro y Dani mareado, Joan se apoya en el asiento delantero porque tanto zoom le ha dejado grogui, Gemma con un globo importante. Veo que no soy la única. Bajamos del avión como podemos y nos sentamos a reponernos. Hasta pasado un rato nadie habla.
Y no sé lo que los demás pensaron al ver aquello, pero a mi se me fue el programa a Out of Memory... Es otra dimensión... Ahí ya se han pasado estos yanquis... Ver ese cañon con ese riachuelo abajo, que seguro que de 10 metros de anchura no baja, esa mezcla de vistas y colores... Es todo aquello que hemos oido hablar de él y mucho más. Lo miras y no lo acabas. Allí, despues de mucho Parque Nacional en el que abres la boca (en unos más y en otros menos, pero la abres siempre), aquí topas con el Number One
Nos dirigimos al Gran Cañón. Comemos, compramos y nos conectamos a Internet. Finalmente a las 4:00 iniciamos la visita oficial. Esta vez en autobuses que van parando en todos los point.
Paseos intensos mediante los autocares que te llevan de punta a punta.
Nos fuimos de allí con la boca abierta, y yo personalmente, con las ganas de volver y cruzarlo a pie. Bajarlo, hacernoche en el Phantom Ranch, y volver a subirlo.
Del Grand Canyon a Flagstaff, una carretera oscura y muy boscosa (de aquellas que les llamamos atajo) y que nos dio algún que otro susto dada la curiosidad de una seri de animalitos nocturnos que quedaba prendados de nuestros focos.
Alojamiento: BUDGET INN
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