Día lluvioso durante el partido, un Girona a base de juego directo y balón parado, y un Betis que quiere jugar con el pie hasta los saques de banda, algo bastante habitual en algunos seguidores futbolistas Béticos del extrarradio. La victoria pudo haber sido también un empate, por ocasiones y porque por lo que se comentó, alguno de los 3 goles anulados a los locales pudo haberse dado como bueno.
Trayecto siempre ameno, incorporación de lujo con un ex-profesional del fútbol, del que cabe escuchar con atención las pocas palabras que explican de estos temas. Relmente fueron muy educativas, y confirmativas de lo que pasa en este mundo.
A pesar de la lluvia, gran escenario para ver un partido de fútbol, sentir la cercanía de los jugadores, y un compadreo con los seguidores cercanos. En estos tiempos de campo cubierto, uno ya no recordaba lo que es mojarse, aunque solo sea en una parte, y no en la que tuvimos un paraguas cercano.
Luego, hambre cubierta a base de tapas, y una pequeña copa de curiosa contradicción musical, tratándose de la ciudad de Girona. "Da para escribir un post", me comentaron los cercanos. Pero eso quizás para el día en que me anime a poilitizar mis opiniones dentro de este blog.
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