Una referencia inevitables es el National Park que agrupa a Kings Canyon y Sequoia. Y en él te invitan tanto a pasearte por un bosquecito lleno de arboles a los que no le llegas ni a la suela, como a adentrarte por un valle escarpado y profundo en el que no parece que fuera a aparecer una zona de descanso tan espectacular.
De las cosas que más me llamaron la atención, fue el saber que los que caen no se debe ni al efecto humano ni a las enfermades, ni a las temperaturas ... Bueno, de hecho, a las temperaturas un poquito sí, porque muchas de las caídas se producen por el propio peso del árbol, cuyas raíces no pueden soportarlo si la humedad existente afecta como para dejar un terreno más blando que no es capaz de soportar todo el peso de una Sequoia.
Puede que Kings Canyon sea de los menos espectaculares, puesto que sus vistas y sus atracciones son bastante corrientes. Son aquellos parques más orientados al ocio del excursionista y montañero que la espectacularidad de otros parques comentados y por comentar. De todos modos, en ningún momento se lamenta el "gastar" un tarde perdiéndote por esa naturaleza, y menos si su cercanía a otros parques no te hace desvíar demasiado de tu trayecto.
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