11 octubre 2009

Agora


Viene precedida de gran bombo, de calibre superproduccionero. Y no defrauda, sobretodo si no se empieza a entrar en el tema de la procedencia española de la película.

Ha encontrado un buen punto de partida y una historia agradecida sobre la que moverse por lo civil y lo criminal, por lo divino y lo humano, por el amor y la guerra, por las ciencias y por las letras, por la geometría.

Sesión adicional de cultura, de la importancia de la educación, del reniego de los fanatismos, de las mujeres. Cine que no necesita la superproducción, ni algunos excesos de cámara o de simbolismos en forma de imagen.

A mi me tiene que gustar: los ingredientes me atraen y la mezcla no se me atraganta.

1 comentario:

Atticus dijo...

A mí me gustó, más allá de algunos planos "à la Google Earth" más propios de la pantalla de créditos de la serie Alf. Ya la comentaremos!