Montserrat 2011

Cada nueva subida a Montserrat es un nuevo reto, especialmente físico, porque a medida que pasan los años y pesan los kilos y pisan los pies con menos fuerza y más dolor, el tema no parece ir a mejor. Siempre hay que confiar en la veteranía dosificante, y en la certeza de que algún año tiene que ser el primero en que no se consiga, sea por la circunstancias que sea.

La novedad de la salida a las 4:00 AM no es una novedad real, porque mis inicios en esto de las subidas era a las 5:00 AM desde LH y chupando carretera desde allí hasta Monistrol. Eso ahora no sería tan fácil, sobretodo despues de observar que, en 200m. de nacional un poco transitada te aparecen enseguida los Mossos preguntando por tu chaleci reflectante...

Pero más allá de Mossos más o menos aburridos y/o chivatos con manos libres o con gasolineras cercanas, la subida es un fantástico ejercicio físico y de convivencia con tus compañeros de viajes, la mayoría clásicos del clásico, y con un fondo físico y humano admirables, más allá de la mejor o peor excelencia de sus cuerpos.

Y agradecer a esta subida, más allá de haberla acabado a pesar del castigo de dos noches de pocas horas de sueño, el estar aislado de una jornada histórica para muchos y peñazo para otros pocos entre los que me incluyo, tanto por los lugares de "incomunicación" por los que se transita, por los acompañantes poco fanaticos de tal jornada (no hubieran estado allí), así como de que mi resistencia física solo me permitiera resistir el partido, cenar y conectar con el séptimo sueño sin llegar a los seis anteriores.